Aunque soñábamos con la casa propia
desde hacía tiempo veníamos alquilando,
no nos sobraba ni un solo peso,
entre luz, agua, alquiler y gastos diarios.
Una triste tarde me dijeron
que la fábrica cerraría por un tiempo,
el seguro de paro no me daría,
para seguir pagando allí donde vivía.
ESTE ES EL CANDOMBE DE LA MUDANZA,
PARA TODO AQUEL QUE NO TIENE CASA,
QUE TIENE QUE IR DE AQUÍ PARA ALLÁ
BUSCANDO UN LUGAR DONDE VIVIR.
ESTE ES EL CANDOMBE DEL INQUILINO,
LUCHA QUE TE LUCHA CON TU DESTINO,
PUES PUEDE SER QUE TENGAS QUE DORMIR,
EN CASA AJENA HASTA MORIR.
Comenzamos buscando desesperados,
y los días, uno a uno, iban pasando,
se acercaba la fecha del desalojo,
y no encontrábamos lugar donde mudarnos.
Conseguimos, luego de muchas angustias,
un alquiler justito a nuestro alcance
y aquí estamos nuevamente de mudanza,
como tantos, inquilinos sin más chances.
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